Inteligencia competitiva. Vigilar para acertar

Inteligencia competitiva. Nuevos escenarios requieren nuevas soluciones.

La inteligencia competitiva es el proceso por el cual las organizaciones recopilan y utilizan la información sobre los productos, clientes, y los competidores, para su planificación a corto y largo plazo. 

La inteligencia competitiva es la colección sistemática de la información abierta, que una vez compaginada y analizada proporciona una mejor comprensión de la estructura, de la cultura, del comportamiento, de las capacidades, y de las debilidades de una firma del competidor.

La inteligencia competitiva es una actividad de suma importancia porque ayuda a las empresas a entender mejor como funciona el negocio. De esta manera pueden aprender a ser mejor que sus competidores.

Estos métodos ya no son suficientes

Las empresas utilizan la inteligencia competitiva para compararse con otras, lo que les permite tomar decisiones informadas. La mayoría de las firmas necesitan conocer lo que están haciendo sus competidores, y la información recopilada permite que las organizaciones se enteren acerca de sus fuerzas y debilidades.

La Inteligencia Competitiva es una actividad enfocada a aportar valor en los procesos de innovación y, para ello, el modelo de IC desplegado debe estar engranado con el modelo de innovación definido. 

Innovar debe de ser un proceso que se active desde primera hora de la mañana, desde que el primero en llegar abre la puerta hasta que el último la cierra al irse. De esta manera la Inteligencia Competitiva se convierte en un proceso que te mantiene alerta las 24 horas del día los 365 días del año (¡los algoritmos no duermen y tampoco celebran la navidad!). 

Gracias a esto las organizaciones de nuestro entorno pueden mejorar sus productos y tecnologías actuales o innovar y desarrollar nuevos conceptos que les permitan dar un salto en su entorno competitivo.